Las disputas entre los dos principales compositores del grupo, Andy Latimer y Peter Bardens, hicieron de la grabación del sexto trabajo del grupo un infierno. Camel habían sido uno de los principales exponentes del sonido experimental y progresivo de Canterbury, pero a estas alturas ya habían comprendido que la vanguardia no da dinero, así que giraron de una manera muy radical hacia el pop. El resultado fue que vendieron más que nunca, pero el disco en sí resulta demasiado complaciente y blando. Fue un éxito, eso si... y definiría las sendas que tomarían en el futuro (en ventas para bien, en calidad yo creo que para mal).
No obstante aun quedaban ramalazos estupendos del pasado, sobre todo gracias a la canción Echoes, pero temas como Down on the farm... pues parecen de un anuncio de Playmobil.
6/10
El disco incompleto y en desorden:
No hay comentarios:
Publicar un comentario