Puede que las críticas que avalaran a la banda de Ian Hunter fueran buenas, pero estaba claro que las ventas (o sea, lo que al público le apetecía escuchar) iban en otra dirección. así que, ni cortos ni perezosos, decidieron que el dinero estaba en el floreciente Glam rock, y se pusieron a las órdenes de la mayor estrella del momento, David Bowie, para que relanzara sus carreras. Con Bowie en la producción y ayudando (a veces más que ayudando) en las composiciones, el nuevo trabajo de Mott the Hoople se convirtió en su mayor éxito de ventas y de crítica. Un álbum de singles infalibles presididos por la canción que le daba nombre (una composición de Bowie).
Diseñado para romper.
9/10
El disco completo: