Se dice que la gabardina que luce el líder de Echo and the Bunnymen, Ian McCulloch, en la portada de su disco debut se la había robado al líder de la banda The Fall, Mark E. Smith. Desde el primer momento, estos británicos de la generación post punk mostraron sus cartas: canciones que apenas llegan a los 3 minutos, atmósferas densas y deprimentes, melodías cuasi góticas, hermetismo confesional.
En su momento, se convirtió en uno de los álbunes debut más significativos de la escena independiente del Reino Unido.
7/10
El disco completo:
https://www.youtube.com/watch?v=3h_Zqqc4P9Y
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