Una de las mayores maravillas que nos legaron los años 90 y que cerraron siglo. Se trata de un triple álbum (fue editado también en 3 volúmenes por separado) en el que el grupo nos ofrece una ingente cantidad de canciones (69, guiño irónico) para hablarnos de las relaciones amorosas. Con una colorida variedad de instrumentos que incluyen el acordeón, el cello, el ukelele, la mandolina, y en realidad cualquiera que os podáis imaginar, sus cuatro miembros se entregan a un pop alternativo de enorme belleza, y guiado por la voz de barítono de su líder, Stephin Merritt (aunque todos cantan).
Una piedra preciosa.
10/10
El disco completo:
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